«El presente documento, constituye el trabajo final de graduación bajo la modalidad de
tesis, el cual aborda como tema: el género en la policía costarricense; es importante señalar,
que la selección del tema surge a partir de un análisis de la realidad, es decir, es producto de
reflexiones teórico-feministas de las investigadoras, en torno a la sociedad contemporánea en
el marco de un contexto patriarcal.
Estas reflexiones, se sustentan en gran medida en los conocimientos que se adquieren
durante la formación en trabajo social, los cuales llevan a posicionarse ética y políticamente
ante la realidad social, donde, como profesionales comprometidas con la justicia social y la
igualdad, es imperativo realizar una lectura crítica de ese devenir histórico, que permita
analizar, comprender e intervenir en los sectores que tornan posible materializar los estudios
de investigación.
Al situar, que la realidad y vida social se encuentra en movimiento en un contexto en el que el poder es desigual para hombres y para mujeres, y que tal como lo señala Calandrón (2012) «…el poder se construye y legitima en las interacciones cotidianas» (p.90); es posible plantear que, esto afecta y condiciona todas las esferas o ámbitos en los que las mujeres se insertan en la cotidianeidad, entre ellos el espacio laboral.
Es a partir de estas reflexiones teóricas, que se plantea como propósito político
contribuir a la comprensión social del género femenino, como constructo sociohistórico
reproducido en la vida cotidiana de las mujeres policías; comprendiendo, que el ámbito laboral
de la policía costarricense es un escenario donde el patriarcado puede operar a plenitud, debido
a las construcciones genéricas de la sociedad que sustentan mediante diferencias, las
desigualdades entre hombres y mujeres, y determinan identidades; aunado a lo mencionado por
Calandrón (2012), quien coloca que la policía es un espacio donde existe un pasado masculino
del trabajo, lo que implica una “. . . constante producción de una masculinidad que cuestiona
la presencia de mujeres” (p.90).
Finalmente, es importante señalar que la investigación emerge, transcurre y finaliza
cargada de preocupaciones, intereses y compromisos de las autoras con otras mujeres, puesto
que, además de trabajadoras sociales, nos comprendemos y reconocemos como mujeres,
insertas en una sociedad que a lo largo de la historia nos ha colocado en una posición de
inferioridad en relación con el lugar que ocupan los hombres en el mundo.»