Análisis de la Intervención del Trabajo Social en los Procesos Institucionales con Personas Menores de Edad Residentes en la Aldea Arthur Gough en Río Oro de Santa Ana, Durante el Año, 2018

La niñez es una población históricamente vulnerable ante factores como la pobreza, violencia, abandono, guerras y desigualdad social. Durante mucho tiempo se les consideró propiedad del Estado o de los padres, lo que generó la necesidad de crear legislaciones internacionales para proteger sus derechos. En 1924 surge en Ginebra la Declaración de los Derechos del Niño, redactada por Eglantyne Jebb, que marcó el inicio de la doctrina de protección integral frente a la de situación irregular. Posteriormente, se elaboraron otras declaraciones en América Latina (Argentina, Perú y Chile) con el mismo propósito. En 1946 se creó el UNICEF, para garantizar los derechos y bienestar infantil en todo el mundo. El 20 de noviembre de 1989 se aprobó la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), reconociéndolos como sujetos de derecho con autonomía progresiva y el derecho a participar en decisiones que les afecten. En Costa Rica, desde inicios del siglo XX se promovieron leyes de protección infantil y en 1930 se elaboró la Declaración de los Derechos de los Niños costarricense. Tras ratificar la CDN en 1990, el país adoptó el enfoque de protección integral, reconociendo a los niños y adolescentes como personas con derechos plenos. A pesar de avances regionales, la desigualdad social persiste en América Latina, afectando a millones de niños que sufren pobreza, desnutrición, falta de educación y violencia. En Costa Rica, un alto porcentaje de hogares continúa en pobreza, por lo que se requiere fortalecer las políticas sociales de protección infantil. Históricamente, el país ha contado con instituciones de cuidado como hospicios y albergues, hoy gestionados por el Patronato Nacional de la Infancia (PANI). Sin embargo, muchos jóvenes egresan sin preparación ni apoyo, lo que limita su autonomía y reinserción social. El Trabajo Social juega un papel esencial al promover la autonomía progresiva de las personas menores de edad institucionalizadas, fomentando su desarrollo integral y participación activa. En este contexto, el estudio se centra en la Aldea Arthur Gough del PANI, en Santa Ana, San José, que alberga a menores con diversas condiciones y busca fortalecer su autonomía mediante una guía de intervención desde el Trabajo Social.